Negándome a la ósmosis las dejé que me formaran
una máscara triste de llanto amarrado.
Transformación es el kemé en mi destino
anunciándome que vendrá cíclicamente
la Dulce Muerte a besarme las heridas.
ponme la mano aquí Macorina, ponme la mano aquí...
clavándome tu chuchillo - rayo de doble filo
(negro noche
espejo ahumado)
abriéndome la armadura de costillas
mientras tus dedos de hueso
APRIETAN
mi corazón
que desborda borbotones de sangre
mientras contenés su pálpito
en la jaula de tu mano.
y era bella tu cintura la misma de aquel danzón
caliente de aquel danzón
Dulce Muerte
beso de miel tu canción de cuna en mi oído
aroma jazmín de noche tu abrazo.
Disculpáme si te moja en su transcurso
el río sonoro de mis lágrimas.
Haceme el amor
ponéme la mano en la entrada húmeda de mi alma.
Tocá las cuerdas de mi guitarra.
Dulce Muerte... ponéme la mano aquí.
y yo sin saber qué hacer de aquel olor a mujer...
Dulce Muerte
mi miel en tu mano.
Mis lágrimas después del orgasmo de tu danzón en mi pélvis,
no te vayás sin dejarme dormida.